Biografía de Aristóteles
Aristóteles
Aristóteles fue junto a Sócrates y Platón uno de los tres grandes filósofos griegos más importantes de la historia de la filosofía occidental. Vivió durante el siglo IV a.C. Fue mentor del gran conquistador macedonio, Alejandro Magno. Su pensamiento estuvo vigente por casi 2.000 años. Sus aportes no se limitaron a la filosofía, sino que incursionó en otras áreas del conocimiento como la lógica y la ciencia.
La vida de Aristóteles
Aristóteles nació en una pequeña ciudad de Macedonia, Estagira, en el año 384 a.C.; debido a esto lo llamaban el estagirita. Su padre, llamado Nicómaco, fue médico real y su madre, Festis, también practicó la medicina. Esto explica el interés que Aristóteles siempre tuvo por la ciencia.
A la muerte de sus padres, siendo adolescente, es adoptado por un tutor que lo envía a estudiar a la Academia de Platón en Atenas por el año 367 a.C., donde permaneció por espacio de 20 años
Con el tiempo fue desarrollando sus propios criterios en torno a lo que considera que es sustancia, materia y forma. Aristóteles cuestionó la existencia del mundo de las ideas. Esto hizo que se fuera distanciando de las ideas de su maestro, elaborando su propio cuerpo teórico conceptual.
Con la muerte de Platón, abandona la Academia. Pasó por un período en los que vivió en otras regiones de Grecia. En Lesbos junto al naturalista Teofrasto, estuvo dedicado a estudiar zoología. Luego retornó a Macedonia a petición del rey Filipo II para que fuese tutor se su hijo Alejandro, que por aquel momento tenía 13 años de edad. Aunque se sabe poco sobre la influencia que tuvo sobre el joven, solo que le dio enseñanza por dos años.
En el año 335 a.C., Aristóteles regresó a Atenas en compañía de su amigo Teofrasto y fundó el Liceo, una escuela donde las clases eran públicas y cuyo nombre hacía honor al dios Apolo Liciu, cuyo templo estaba cerca. Por varios años el Liceo compitió con la Academia de Platón, con la diferencia de ser completamente gratuito. Allí Aristóteles formó una biblioteca con sus textos y los de sus discípulos. Muchas de sus obras que han llegado a nuestros días pertenecen a este período.
El pensamiento aristotélico
La filosofía de Aristóteles marcó durante siglos el pensamiento de occidente y su influencia continúa en muchas de las corrientes más modernas. Se estima que el filósofo fue autor de 200 obras, de las cuales solo han llegado 30 a nuestros días. Aparte de ser el padre de la lógica formal, también lo es el de las ciencias biológicas. Su filosofía está caracterizada por su realismo, en contraposición al pensamiento de su maestro basado más en el idealismo del mundo. Su interés por la naturaleza, la astronomía, la política, la ética, la literatura y la epistemología influyó en las distintas ramas del conocimiento.
Aristóteles, el padre de la Lógica
Se considera que fue Aristóteles el primero en tratar de estudiar la lógica del pensamiento, por lo que se le considera, padre de esta disciplina. Propuso una serie de modelos para evaluar la validez de un determinado razonamiento. Establece los métodos inductivos y deductivos como herramientas de análisis. Para el razonamiento deductivo crea el concepto de silogismo, el cual parte de los principios de validez o invalidez de un conjunto de premisas de un discurso. De la misma manera, establece el principio de no contradicción, por lo que un discurso contradictorio carece de sentido, puesto que una proposición y su negación no pueden ser verdaderas al mismo tiempo y en el mismo sentido.
La Metafísica
Según el filósofo al ser humano lo forman las siguientes categorías que constituyen su mundo: sustancia, acción, relación, pasión, tiempo, situación, cantidad, lugar y posesión. En la naturaleza del hombre está el principio de reposo y movimiento, siendo el movimiento el principal motor de cualquier cambio.
La Ética
Otro aspecto importante de su pensamiento es la felicidad, los seres humanos naturalmente tienden a ella. De acuerdo con el filósofo, la búsqueda del conocimiento y la razón es lo que permite alcanzar la verdadera felicidad. Las virtudes comprenden tanto la voluntad como el intelecto, por lo tanto, permiten controlar la parte irracional del ser humano. Con el desarrollo de las virtudes se alcanza la moral, la felicidad, la justicia, la templanza y la sabiduría.
La Teoría Literaria
Aristóteles se dedicó a estudiar la estética y las formas del lenguaje enfocándose en la poesía imitativa, al contrario de Platón que partía del concepto de belleza. Su Poética no ha perdido vigencia y es la base estructural para la elaboración de obras de teatro, cuentos, relatos y novelas.
Pensamiento Político
Aristóteles concibe al hombre como un ser de naturaleza social que forma parte de una comunidad y que busca vivir de la mejor manera posible. Por ello determina que existen seis tipos de gobiernos que buscan el bien común o el bien particular. Según su visión, los gobiernos que se basan en el bien común son la monarquía, la aristocracia y la democracia. La búsqueda del bien particular es lo que provoca la degeneración de estos tres tipos de gobierno. Así la monarquía deviene en tiranía, de la aristocracia en oligarquía y la democracia pasa a demagogia en su fase corrupta.
El hombre de ciencias
Aristóteles realizó importantes descubrimientos mediante la observación y el análisis en diversas ramas de la ciencia cuyos aportes permanecieron vigentes por casi 2.000 años, hasta que, el progreso científico fue dejando atrás muchos de sus postulados.
Estableció que los elementos que conforman la tierra y el universo son: tierra, aire, agua y fuego, además del éter, el cual es el quinto elemento que mantiene las órbitas celestes. Demuestra la redondez de la tierra y la ubica en el centro del universo.
Consideró que existían tres reinos: mineral, vegetal y animal. Estudió tanto la anatomía como la fisiología de muchos seres vivientes como para distinguirlos entre vertebrados e invertebrados.
Muerte misteriosa del filósofo Aristóteles
La muerte de Aristóteles sigue siendo un misterio. Con la muerte de Alejandro Magno, los macedonios empezaron a ser perseguidos en Atenas. A pesar del tiempo que estuvo viviendo y enseñando el filósofo en la capital helena, no le quedó más remedio que mudarse a la isla Eubea, donde acabó viviendo en Calcis. Según los historiadores, al año siguiente, en el 322 a.C., Aristóteles apareció muerto por causas desconocidas.